Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible.
La verdad es que tu realidad como hombre o mujer no se hace sola, sin antes aprender de alguien más.
Es en la primera etapa de tu desarrollo, en la infancia, cuando te encuentras en el primer arquetipo de tu vida, para unos es el padre y para otros es la madre.
Pero es el adulto, que te enseña a interactuar con el mundo.
Te enseña a determinar lo correcto y lo incorrecto y a desenvolverte victoriosamente en la complejidad de la selva humana.
No obstante,
A medida que crecemos, nos vamos haciendo cada vez más independientes y observamos que nuestros padres no son los únicos arquetipos que existen y nos fijamos en otros modelos a seguir que resultan más atractivos que los de nuestros padres.
Inexpertos, ingenuos e inocentes, alzamos la vista y observamos a los demás arquetipos ficticios o reales, de una forma cautivante y vamos copiando su forma de comportarse.
Siempre buscamos modelos seguir y hombres de los cuales aprender exitosamente.
Sin embargo no todos encuentran admiración por arquetipos benevolentes, virtuosos o buenos.
Hay algunos que siguen arquetipos nocivos tanto para el individuo como para la sociedad.
Los arquetipos son ideales en la presentación de una vida ideal y en la presentación de una guía de conducta.
Un manual sobre como experimentar la vida y no morir en el intento.
Cada hombre busca en los arquetipos aquello que desea o aquello que le falta.
Si deseas poder o éxito financiero sin ser éticamente correcto, no tendrás problema en admirar modelos a seguir altamente corruptos como Pablo Escobar o Al Capone.
Si deseas tranquilidad, templanza y valentía, optarás por ejemplos a seguir donde la vida se haya centrado en la maestría de esas virtudes como Marco Aurelio, Confucio o Lao Tse.
Si deseas desarrollar una personalidad carismática y convertirte en un líder, escucharás con atención las estrategias de Alejandro Magno, Napoleón Bonaparte o Jose Elías.
Si buscas compasión, amor, virtud y excelencia, te centrarás en las enseñanzas de Jesús de Nazaret.
Si anhelas convertirte en un mal llamado macho alfa, observarás las acciones de Mario Luna, Andrew Tate o Erik James Horvat-Marković.
Estos ejemplos son unos pocos de los cientos de miles que sirven de arquetipos e influencia de los miles de millones de hombre que vivimos en el aquí y en el ahora.
Dicho esto, te lanzo un par de preguntas.
¿Quiénes son tus arquetipos?
¿A quién admiras y de quien aprendes?
¿Porqué quieres emular la vida de esos personajes?
¿Estás aprendiendo de tus arquetipos o los estás imitando?
Como diría Bernard Shaw:
«La vida no va encontrarse a uno mismo, sino de crearse a uno mismo»
Dicho esto, que disfrutes de tu domingo y si quieres que te eche un cable en vender tu piso…
Abajo.
P:D: Mi zona geográfica de vender pisos va de Valencia Ciudad hasta Ollería. Si tienes algo para vender en ese territorio, puedo ser tu tipo.
Copyright 2024 © Alejandro Pop
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible.
Las cookies estrictamente necesarias tiene que activarse siempre para que podamos guardar tus preferencias de ajustes de cookies.
Si desactivas esta cookie no podremos guardar tus preferencias. Esto significa que cada vez que visites esta web tendrás que activar o desactivar las cookies de nuevo.
Más info sobre política de cookies